Mercedes sigue sin carburar. El equipo que hasta no hace mucho dominaba sin oposición alguna en la F1, compitiendo tan solo contra sí mismos, no da con la tecla desde aquella carrera, para ellos fatídica, de Abu Dhabi 2021. Desde ese momento en que Hamilton estuvo a una vuelta de su octavo Mundial. Desde un año que supuso su final y el comienzo del camino triunfal de Max Verstappen que es ya tricampeón del mundo.
Que cuando llegó la última victoria de Hamilton no sumaba ni un solo título, pero ya tiene tres. Sí, no dice mucho del trabajo de Mercedes. No dice mucho de la idea, concepto y propuesta de una marca que ha pasado de los cero pontones a un 'plan B' que tampoco está funcionando en 2024. Su mejor puesto, un quinto de Russell en Bahrein.
En Jeddah, sexto. Y Hamilton noveno. Lewis, en Sakhir, séptimo. Así, complicado. Así, difícil. Lo peor, para ellos, fue ver a George ser totalmente incapaz de superar a Fernando Alonso en la pista saudí.
A eso apunta Toto Wolff, jefe del equipo Mercedes: "Nos falta velocidad en curvas rápidas y somos muy débiles. Nos falta carga aerodinámica. Hay algo que no entendemos porque somos rápidos en todo lo demás".
"Con ese alerón trasero..."
"Al tener un alerón trasero más pequeño compensamos lo que perdemos en la alta velocidad. Ahí se va el tiempo por vuelta", relata en 'RacingNews365'.
Y ya van varios años: "Hay algo que necesitamos detectar. No es por falta de ganas. Nos esforzamos, daremos un gran empujón con más datos".
"Pero esto no es algo que podamos encontrar en un ordenador. Creemos que la velocidad debería ser así, y se puede aumentar la carga aerodinámica", termina Wolff.