A pesar del cruce de declaraciones entre Carlos Sainz y Charles Leclerc después del Gran Premio de España, el monegasco ha querido poner paz de manera definitiva. Lo ha hecho en la previa del Gran Premio de Austria de este fin de semana.

"Para mi relación no, porque volvimos en el mismo avión de vuelta, todo está bien entre nosotros. Hay cosas que parecen grandes desde fuera, pero nos conocemos desde hace mucho, sabemos que después de la carrera hay tensión, y en el fragor de la batalla estamos decepcionados, pero todo se habla tras la bandera a cuadros, por lo que no estoy preocupado", ha dicho Charles.

"En algunas carreras hemos tenido tensión, pero hemos sabido cómo hablar, así que este no es el caso, por lo que no me preocupa. Hemos trabajado muy bien, supongo que la pregunta va por la última carrera, pero hubo momentos complicados cuando hubo compañeros, pero son cosas que suceden", dice el compañero.

Asegura que todo se solucionó internamente: "Y se trata de cómo lo afrontamos después de las carreras cara a cara, así que no me preocupa, y no he visto ningún cambio de que vaya a ser así".

"Sabemos que será bueno que haya una buena relación, algunas veces seré yo quien me exceda, y otras veces será él, pero solo habrá que hablarlo", sentencia Leclerc.