Max Verstappen es el piloto más rápido. Y Red Bull es coche más rápido. No hay discusión sobre eso en la Fórmula 1. Ambos ya han conseguido los títulos del mundial de pilotos y del mundial de constructores.
Pero a pesar de su superioridad, Lewis Hamilton no renuncia a poder competir contra el neerlandés. Lo dijo durante el Gran Premio de Estados Unidos, en el que fue sancionado y perdió su posición final.
"Quiero pelear por el campeonato, quiero pelear contra Max. Creo que soy uno de los únicos pilotos que puede hacerlo...", ha expresado el siete veces campeón del Gran Circo.
Pide a los suyos un esfuerzo extra para volver a tener el coche más rápido de la parrilla: "Tenemos que reducir esa brecha con Red Bull...".
Mejoras en el coche y más eficacia también en los boxes. Hamilton pide a los suyos que remen todos a una: "Tenemos que tener el paquete, no sólo el coche, sino que también debemos operar mejor en nuestras paradas en boxes".
El inglés tiene un gran objetivo en las pocas carreras que restan de la presente temporada: el segundo puesto del campeonato, ahora en manos del Red Bull de Sergio Pérez. La diferencia es de 39 puntos. Y quedan cuatro fechas para la conclusión.