Red Bull está viviendo su época de mayor dominio en el mundo de la Fórmula 1, más incluso que en la época dorada donde, de la mano de Sebastian Vettel, consiguieron 8 títulos mundiales. Ahora, con Max Verstappen, todo apunta a que, si nadie les puede parar, podrán romper todas las estadísticas de la competición.
El neerlandés ha ganado ya dos campeonatos del mundo consecutivos con los austriacos y todo parece indicar que este año conseguirá el tercero. Max se ha mostrado tranquilo, rápido, extremadamente competitivo y, sobre todo, infalible.
Ha logrado dominar en ocho de las primeras diez carreras, cifras que no se han visto en toda la era híbrida en la Fórmula1. Una era conocida, precisamente, por el aplastante y aburrido dominio del Mercedes de Lewis Hamilton.
Y es que, tomando como referencia los diez primeros Grandes Premios, Lewis nunca ha dominadotanto como lo está haciendo Max.
En el año 2019, que es el año que más ha dominado en las primerascarreras, el británico se subió a lo más alto en siete de las diez carreras, una menos que Max este año.
Además, durante la era híbrida en la que Hamilton brillaba, Nico Rosberg logró arrebatarle un título mundial en el año 2016 con el mismo monoplaza.
Algo que, hasta el momento, 'Checo' Pérez no ha podido ni tan siquiera acercarse al neerlandés.
Fernando Alonso, la única alternativa
A pesar de que no parece que haya nadie capaz de hacerle frente a Max Verstappen, el nivel mostrado por Fernando Alonso en este arranque de temporada está a la altura de el del neerlandés. Logrando, con su Aston Martin, seis podios en las primeras diez carreras.
Por ello, aprovechándose de aquellos circuitos que se beneficien de las características de su Aston Martin, el ovetense tratará de ponerle las cosas difíciles al de Red Bull. Empezando este próximo fin de semana en el GP de Hungría, donde tendrá una oportunidad de oro para lograr la '33'.