Ya lo decía Helmut Marko, asesor de Red Bull, tras el Gran Premio de Australia: el equipo no se podía confiar ya que Fernando Alonso, entonces, estaba a menos de una carrera (25 puntos) de Max Verstappen.
Ahora, tras la carrera al sprint y el GP de Azerbaiyán, la distancia con respecto al neerlandés es de 33 unidades -sí, 33-, pero desde la escudería de las bebidas energéticas el miedo no ha decrecido.
¿Por qué?, ¿por qué preocuparse por un equipo que hace meses era el séptimo coche? Amén de por la increíble evolución de Aston Martin en invierno, el gran temor de Red Bull son las consecuencias de la sanción por exceder el límite presupuestario y la reducción del tiempo en el túnel de viento.
Esto, conforme avance la temporada, igualará las fuerzas entre los equipos de la cabeza de la parrilla, y los de Silverstone son sus inmediatos perseguidores.
Christian Horner, jefe de Red Bull, tiene claro que, llegados a Miami, la batalla está entre sus pilotos, cuya diferencia es de apenas seis puntos.
"Bueno, en este momento son ellos dos, hay una pequeña diferencia entre el resto de la parrilla, pero quedan 19 carreras más y cinco carreras al sprint", ha explicado en declaraciones recogidas por 'Motorsport'.
Eso sí, la "fiabilidad" puede jugarles una mala pasada: "Así que son muchas carreras y queda toda una variedad de circuitos diferentes por los que pasar. Podría ser de ida y vuelta entre los dos, la fiabilidad será un factor clave".
Tras Miami, arrancará la gira europea con Imola, Mónaco y Barcelona, donde Mercedes, Ferrari y Aston Martin presentarán sus mejoras y recortarán diferencias. Por ello, quieren llegar con un buen "colchón" al viejo continente.
"Y, por supuesto, en lo que también estamos más centrados en este momento es en crear un colchón de puntos con ambos pilotos", ha expresado.
"Porque cuando volvamos a Europa, estoy seguro de que habrá mejoras considerables en el resto de coches. Y por supuesto, nosotros tenemos una reducción del desarrollo este año. Ahí es donde estamos centrados, en tratar de crear una diferencia", ha zanjado.