"Red Bull ni siquiera ha desarrollado su coche desde agosto; definitivamente es una preocupación": así de tajante se mostró Lewis Hamilton antes del Gran Premio de Abu Dhabi cuando le preguntaron por sus previsiones de cara a la próxima temporada.

El equipo de las bebidas energéticas no ha introducido nuevas piezas reseñables, se ha ahorrado horas de túnel de viento y mucho dinero, lo que hace pensar que invertirá todo en 2024.

Hamilton sabe de lo que habla porque él vivió lo mismo cuando Mercedes comandó con puño de hierro en Fórmula 1 entre 2014 y 2020.

"Cuando ganábamos campeonatos del mundo, podíamos parar pronto y empezar a desarrollar el coche del año siguiente, así que siempre teníamos ventaja", explicó.

Ahora, en el otro lado, Lewis quiere erradicar estas situaciones... aunque la Fórmula 1 ya ha incidido en diversas ocasiones que no lastrará al campeón.

"Deberíamos encontrar una manera de parar esa inercia para que no siga sucediendo década tras década. Tienes a Ferrari que ganó durante un periodo de tiempo y luego a Mercedes. Ahora a Red Bull le ha tocado su era. Podrían alargar su dominio hasta 2026", añadió.