Max Verstappen no tendrá un camino de rosas que le lleve a ganar el tricampeonato. Le ha salido un duro rival, que hasta la fecha compite con las mismas condiciones que él, Sergio Pérez.
El mexicano a sus 33 años -sí, 33- ha demostrado que no va a regalar ninguna opción al neerlandés. La prueba de que 'Checo' va a por todas fue el mensaje que lanzó al universo de la Fórmula 1.
"Teniendo tres hijos en casa, no estaría viajando por el mundo si no creyera que puedo ser campeón mundial", dijo en 'Sky Sports'.
El piloto mexicano tiene ese sueño desde que llegó en marzo de 2011 al 'Gran Circo'. Hasta la fecha ha conseguido seis victorias, dos este curso, y se ha consagrado como un experto en circuitos urbanos.
Su actuación en Bakú fue soberbia, y no bajó el ritmo ante el empuje de Max: "Fue realmente importante poder cumplir cuando importaba".
Esta demostración de habilidad y resistencia son sus bazas suficientes para creer que ganará el Mundial: "Estoy trabajando para eso, hay mucho de lo que puedes hablar fuera del auto, es importante cumplir en la pista", dijo.
"Hay un nivel muy alto de respeto entre Max y yo, y todo el equipo, me refiero al nivel en el que estamos manejando, nos estamos presionando mucho, obviamente queremos vencernos, quiero ganar este campeonato tanto como él", añadió.
La competencia continuará enMiami, donde en 2022 ganó Verstappen. El mexicano adelantó que seguirá con su plan "no creo que Max y yo vayamos a cambiar, lucharemos entre nosotros como lo hicimos y tan duro como podamos". Ante todo, 'Checo' Pérez volvió a recalcar que habrá "respeto".