Cuando Carlos Sainz conoció que perdía su asiento en Ferrari ante la llegada de Lewis Hamilton, la opción de Mercedes era muy atractiva. Pero ese acuerdo no llegaría pronto. Porque Toto Wolff quería esperar y ver qué ocurría con Max Verstappen. Su opción 'B', la que finalmente saldrá adelante, era la del jovencísimo Kimi Antonelli.

Y Carlos ha explicado que no quería esperar. Ahora que se ha confirmado su llegada a Williams, ha contado cómo fueron las conversaciones: "Creo que llegado el mes de agosto, había esperado suficiente y yo también tengo que velar por mis propios intereses, por mi propia carrera deportiva y tomar la decisión que yo quiero tomar y no depender tampoco de terceras partes".

"Por eso era importante para mí tomar esa decisión yo y ser yo dueño de mi propio destino y no esperar, habiendo esperado todo lo que esperé hasta el 1 de agosto prácticamente, tomar mi decisión que era por mi lo importante antes de verano", explica el piloto español en la previa del Gran Premio de Países Bajos.

No irá a Mercedes, pero sí tendrá ese motor en Williams. Ha firmado un contrato multianual y podría tener una buena oportunidad en 2026 con la llegada del nuevo reglamento. Su ambición es total... y su decisión podría ser muy interesante para la Fórmula 1 del futuro.