Max Verstappen ha sido una trituradora de compañeros en Red Bull durante los últimos años. Sólo Sergio Pérez le ha resistido, aunque ni mucho menos le ha podido derrotar. Pero ahora en la escudería reconocen que "quizá" se equivocaron con la elección de pilotos.
Se refieren a Pierre Gasly y Alex Albon, quienes duraron poco al lado del neerlandés. Christian Horner, jefe de Red Bull, ha reconocido que su oportunidad llegó demasiado pronto.
En declaraciones a 'Motorsport' habla de Pérez y aprovecha para detallar los errores cometidos en el pasado: "La principal clave para incorporar a Checo fue su experiencia, quizás fue injusto traer a los dos anteriores chicos tan pronto".
"Checo, con su experiencia, que ha acumulado a través de algunos duros golpes a lo largo de su carrera, creo que nos ha dado una persona muy entera, un gran piloto de equipo. Ha tenido una gran importancia en el desarrollo del coche y es muy fácil trabajar con él. Son las razones principales por las que le incorporamos y está rindiendo bien", explica Horner.
La "madurez" de Pérez es la que le ha permitido asumir que en estos momentos es casi imposible derrotar a su compañero: "Es duro para él tener a Max Verstappen como tu compañero, ya que está marcando la referencia en la Fórmula 1, pero Checo es lo suficientemente maduro para ser capaz de gestionarlo".
"Creo que va a seguir mejorando y desarrollando su propio rendimiento, y es bueno verle siendo competitivo. Ganó dos carreras la pasada temporada, otra carrera el año anterior, fue una pieza clave en nosotros para ganar el título de constructores", ha sentenciado Horner.
Este es el tercer año de Pérez en Red Bull. De momento, como en los anteriores, ha comenzado por detrás de Verstappen. En Bahrein el bicampeón de la Fórmula 1 volvió a ser el más rápido por mucha distancia.