Carlos Sainz quiere su primer podio esta temporada. Sólo Charles Leclerc ha subido al cajón con el Ferrari. Y eso podría cambiar en Austria. El español es optimista de cara a este fin de semana. "Lo de Canadá fue un subidón...", ha dicho en la rueda de prensa oficial previa a la carrera.
"Viendo el ritmo de carrera, fuimos hacia delante y no hacia atrás el domingo. Acabamos cuarto y quinto con los dos coches, pero la percepción fue diferente, ha sido un subidón de motivación para todo el equipo", ha expresado Sainz.
"Para evitar tráfico excesivo en la pista, la solución a corto plazo podría ser dividir la Q1 en grupos de 10 coches, con ocho minutos por grupo y un coche por equipo, sobre todo en las pistas más cortas", detalla el compañero de Leclerc.
Celebra el formato al sprint: "No debería afectar demasiado a la parrilla porque divide el rendimiento de los coches. También podría haber una vuelta única en el fin de semana de sprint, me gustaba este formato de tener toda la pista para mí, sería divertido".
"El equipo ha hecho un trabajo increíble con estas mejoras que introduciremos este fin de semana. Las gracias que les he dado por ello no han sido suficientes. Hay que felicitarles por el esfuerzo y esperamos dar un paso al frente", ha sentenciado Sainz.
Es quinto en la clasificación de pilotos con 68 puntos. Muy lejos de Lewis Hamilton, de Fernando Alonso y por supuesto de los dos Red Bull, Checo Pérez y Max Verstappen. Pero cree Sainz que esa distancia se puede reducir en las próximas carreras.