Carlos Sainz al habla

La reflexión de Sainz sobre la sanciones por el uso de lenguaje soez: "Es demasiado..."

La FIA ha obligado a los pilotos a mantener un comportamiento modélico tanto ante las cámaras como en el propio coche. Sainz, en contra de controlar sus reacciones durante las carreras.

Carlos Sainz con uno de sus ingenieros en WilliamsCarlos Sainz con uno de sus ingenieros en WilliamsWilliams

Tanto pilotos como escuderías afrontan una campaña que promete ser ilusionante y exigente en la Fórmula 1. En las reglamentaciones, se asentará la norma de no poder utilizar lenguaje soez en las intervenciones por radio y rueda de prensa. Esta premisa ya se impuso a mitad de la temporada pasada con Max Verstappen como protagonista. El neerlandés terminó sancionado por decir 'palabrotas' por radio en uno de los episodios más polémicos del curso.

Carlos Sainz se ha pronunciado sobre esta regla impuesta por la FIA. El madrileño ha valorado en rueda de prensa esta norma: "Yo estoy a favor como grupo de hacer un esfuerzo. No es difícil tener un buen comportamiento y un buen vocabulario. Los niños nos ven".

Sin embargo, el nuevo piloto de Williams también entiende que esconder las reacciones en un momento de tensión durante los grandes premios perjudica la esencia de la competición. Para Carlos, entender el comportamiento de los pilotos dentro de los coches ayuda a que el espectador consiga seguir el transcurso de la carrera con total normalidad.

"Para mí, es una parte fundamental, porque puedes sentir la emoción real del deporte y a veces el vocabulario del piloto", ha señalado Sainz sobre la importancia de mantener la magia de la competición.

De hecho, el madrileño compara este hecho con los micrófonos que se quieren introducir en los campos de fútbol. Un aspecto que para Sainz no es diferente con el lenguaje de los pilotos de F1: "Creo que no debería controlarse demasiado porque vosotros os perderéis mucho de lo que ocurre dentro de un coche. No quieres poner un micrófono en el interior de un campo de fútbol y escuchar a los jugadores, porque es una situación equivalente".

Esta nueva norma ha puesto en total alarma a los pilotos a la hora de gestionar sus emociones. Una reglamentación que puede fomentar los valores que pretende la FIA para conservar un gran respeto entre los pilotos o, por el contrario, perjudicar la esencia que la Fórmula 1 ha mantenido a lo largo de su historia.