Max Verstappen sigue siendo uno de los grandes nombres, por algún motivo, del mercado de pilotos. A pesar de tener contrato hasta 2028, y de que cuenta con un arma capaz de ganar el Mundial como es el Red Bull, el neerlandés es el objeto de deseo de Mercedes... y eso está convirtiendo todo en un culebrón que parece no tener final.

A pesar de sus propias declaraciones, el jefe de Mercedes no se rinde. Toto Wolff quiere que sea él quien ocupe el asiento que deja Lewis Hamilton, y hay quien va animando a Max a probar suerte y a vestirse con los colores de la marca de la estrella.

Es el caso de Robert Doornbos, expiloto de F1 y compatriota de Verstappen. En palabras que recogen en 'Motorsport', ha insinuado que están "pasando cosas" en Red Bull.

"Malestar dentro del equipo, la marcha de Newey, un segundo piloto que da demasiados dolores de cabeza... Están pasando cosas, y Mercedes es cada vez más competitivo", afirma.

E insiste: "Max necesita saber si Red Bull puede seguir dominando o si todo ha terminado. Yo sigo creyendo que elegirá Mercedes".

"Pero es importante saber qué equipo tendrá el mejor motor en 2026. En Mercedes preferirán que se fuese ya el año que viene para decir adiós a un campeón y tener a otro", explica.

Porque las cosas han cambiado: "Mercedes no tenía un buen coche a comienzos de 2024. Era obvio que Verstappen se quedase en Red Bull en 2025. Pero ahora... Ahora todo es diferente".