De ser el coche más dominante en la primera parte del curso a verse adelantados por McLaren de manera evidente. Red Bull está en problemas. Problemas serios. Lando Norris le sacó 20 segundos a Max Verstappen y pudo ser más si no hubiera fallado en la salida.
El neerlandés lo tiene claro. Podrían perder tanto el mundial de constructores como el mundial de pilotos.
"Las últimas carreras no han sido fantásticas, así que creo que, en cierto sentido, eso ya es un poco alarmante", dijo el tres veces campeón de la Fórmula 1, que busca el cuarto de manera consecutiva.
"Sabemos que no debemos entrar en pánico, sólo estamos tratando de mejorar la situación y en eso estamos trabajando. Algo en el coche ha hecho que sea más difícil pilotar y es muy difícil determinar de dónde viene en este momento. El equilibrio del coche, los neumáticos se desgastan demasiado, pero así ha sido últimamente. Sobreviraje, subviraje. Simplemente no hay equilibrio en el coche y es muy difícil de conducir", sostiene Max.
Christian Horner, jefe de la escudería de las bebidas energéticas, destaca que Verstappen minimizó daños: "Los días que no puedas ganar, tienes que acabar segundo".
"Tenemos suerte de que hayan tenido un rendimiento inferior al esperado al principio del año, por lo que tenemos una ventaja de 70 puntos, pero esa ventaja puede disminuir con bastante rapidez. Es notable que esta sea solo la segunda victoria de Lando con ese coche", detalló Horner.