La carrera del Gran Premio de Australia se convirtió en un caos por las banderas rojas, la salida relanzada y todo lo ocurrido después. Hubo muchas protestas, como las de Fernando Alonso por la radio. También las de Toto Wolff, jefe de Mercedes.
El austriaco dice que "hay que analizar" todo lo ocurrido en Albert Park, aunque sostiene que las banderas rojas "sí dan espectáculo": "Tenemos que analizar lo que ha pasado con las banderas rojas".
"Si las miras como un factor de espectáculo, ha estado todo bien, pero lo de hoy quizá haya sido demasiado. Cuando hemos parado a George, hemos hecho lo correcto y podría haber luchado en la zona alta, pero ha tenido ese problema con la unidad de potencia", ha expresado.
Polémicas aparte, Wolff celebró el rendimiento de su coche en esta prueba, con Lewis Hamilton subiendo al segundo cajón del podio por delante del Aston Martin de Alonso.
"Hemos tenido un buen ritmo en Australia y hemos estado muy a la par de Aston Martin y Ferrari. Son buenas noticias para nosotros y creo que hemos dado un paso hacia delante este fin de semana, tanto a una vuelta como en ritmo de carrera", ha expresado el jefe de las flechas de plata.
"Maximizamos lo que teníamos y ahora debemos seguir trabajando para entender el coche. Nos ayudará a llevar más mejoras y luchar con los líderes más a menudo", ha sentenciado.
Mercedes ha despertado. Compitieron de tú a tú con Aston Martin, convirtiéndose en el segundo coche más rápido por detrás de Max Verstappen. Si George Russell no terminó en el podio fue por ese fallo de fiabilidad en su motor. Pero las noticias que llegan para los de Wolff son más que optimistas.