Desde su llegada a la Fórmula 1, Max Verstappen no ha dejado de mostrar su personalidad en cada movimiento que hacía en pista. Sin embargo, si algo también le ha caracterizado han sido sus acaloradas comunicaciones por radio con su ingeniero.

Tras su aterrizaje en Red Bull en 2016, Gianpiero Lambiase, uno de las personas con mayor notoriedad en el muro de la marca austríaca, ha sido su ingeniero. Juntos han vivido desde la batalla con su antiguo compañero, Daniel Ricciardo, hasta la consecución de sus tres títulos mundiales, atravesando la incesante lucha con Lewis Hamilton en 2021.

A juzgar por el tono de estas conversaciones por radio, todo parecería indicar que la relación entre Verstappen y su ingeniero es bastante distante. Una impresión que está a años luz de la realidad.

"Así es como funciona la relación. Estaría muy, no enfadado, pero no me gustaría tener un ingeniero que sea muy monótono o que simplemente diga 'entendido... comprueba eso'. Pero esa es nuestra relación. Somos muy directos y si no nos gusta algo, por supuesto lo decimos", dice.

El neerlandés critica cómo la organización de la F1 decide qué fragmentos emitir, algo que puede desvirtuar la realidad: "También es un poco culpa de la F1 que los mensajes reciban tanta atención porque transmiten todo sólo para difundirlo. No necesitan transmitirlo, si sabes a lo que me refiero. Así que supongo que también les gusta la emoción que se desprende".

"Pero nuestra relación nunca ha cambiado de esa manera. Y también después de la carrera estamos absolutamente bien porque, por supuesto, estamos ahí para ganar la carrera", sentencia Verstappen sobre su relación con su ingeniero, según 'Car and Driver'.

Esta dupla se ha convertido en una de las más exitosas de la máxima categoría del motor, cosechando a día de hoy 54 victorias juntos, convirtiéndose en el tercer piloto con más victorias de la Fórmula 1, solo detrás de Lewis Hamilton y Michael Schumacher.