La FIA no permitirá a partir de 2023 que los pilotos se expresen con reivindicaciones políticas y sociales en el paddock de la Fórmula 1. Algo que provocó la indignación de Lewis Hamilton y ahora de Sebastian Vettel, ya retirado de la competición.
En declaraciones a 'AutoBild' ha calificado estas normas como "una tontería": "Espero que los pilotos sigan teniendo el valor de defender su opinión y expresarla".
"Por supuesto, siempre hay que revisar el tema. Pero creo que es absolutamente importante tomar una posición sobre algunos temas y hemos visto en los últimos años que más y más personas han tomado una posición", dice el ya expiloto alemán.
A partir de esta temporada, la FIA no permite "comentarios políticos, religiosos o personales".
La amenaza de Hamilton
El pasado 5 de enero Hamilton fue muy claro en 'New York Times', amenazando con dejar la Fórmula 1: "Si no puedo tener conversaciones con la gente, si no puedo hablar de esos temas tan delicados, no tendrán la repercusión que deben tener".
"Si no puedo defender los derechos humanos y no puedo continuar con lo que he estado haciendo estos años, prefiero no correr más", dijo el siete veces campeón del Gran Circo.
Siete tarjetas en las últimas nueve jornadas
Kike Salas, jugador del Sevilla, detenido por forzar tarjetas amarillas para apuestas ilegales
'El Confidencial' informa que la Policía ha detenido al defensa del conjunto hispalense por haber provocado que le amonestasen para que su entorno se lucrara con apuestas.