La edad nunca dejará de ser un simple número que refleja nuestra experiencia, pero no nuestra realidad. Y eso precisamente demuestra día a día Simeón Olivares. A sus 72 años, Simeón ha participado en 80 maratones, habiendo competido en cuatro a lo largo de este último año.
Sufrió un tumor de vejiga, que descubrió con 53 años "porque sangraba corriendo". Tras cinco operaciones y doce años de recuperación, le dieron el alta y volvió a correr.
Sin duda, de los 80 maratones en los que ha portado un número, los más importantes para él fueron los dos que corrió en Nueva York: "Para mí fue un sueño ir allí, el ambiente es único".
A día de hoy, sigue entrenando en su club porque aun le queda un deseo por cumplir: "Sueño con que mi hijo y mi nieto mayor corramos el maratón de Valencia", reconoce.
"Lo importante no son los maratones que corres, es que te encuentras bien y mantienes la ilusión", concluye Simeón, cuya mirada ilumina la figura de un veinteañero con la ilusión de no dejar de crecer en el deporte.