"Llevaba guantes reforzados. La investigación determinará si la violencia era premeditada". Eso es lo que las fuentes policiales han contado a 'France 2'.
Actualmente, Christophe Dettinger, el exboxeador que golpeó a los policías franceses para defender a los 'chalecos amarillos', está en prisión y ha pedido perdón por lo ocurrido.
Prisca Vicot, boxeadora, cree que Dettinger no se defendió, sino que atacó de manera "gratuita". "Es flagrante, inaceptable", opina Vicot.