El reto que ha completado Pau Capell es absolutamente increíble. Y, además, añadiéndole una lesión en el tobillo que le surgió al comienzo del recorrido.
Consistía en dar la vuelta a la isla de Menorca corriendo y sin parar en ningún momento. Un total de 185 kilómetros que completó en 16 horas.
Y en 'Jugones' ha relatado cómo fue la experiencia, recordando esos dolores en el tobillo: "En el kilómetro 30 ya se me despertó este dolor en el tobillo y estuve 156 kilómetros corriendo con dolor".
El recorrido contaba con la dificultad de los obstáculos. "Toda la isla está llena de piedras o de pequeñas subidas y bajadas", explica Pau.
El momento más complicado llegó en el kilómetro 130, todavía con algo más de 50 por delante: "En el kilómetro 130 me derrumbé. Me puse a llorar por el cansancio".
Pero Pau no se rindió y acabó completando el reto, batiendo el récord con una bajada de tiempo de más de dos horas. Todo ello a pesar de los constantes dolores en un tobillo. Un reto absolutamente salvaje.