En los últimos tiempos se ha convertido en habitual ver estas imágenes en las costas de Australia. Tiburones junto a surfistas, que en muchas ocasiones ni perciben que el animal está cerca.
Es el caso de estas imágenes en las que el surfista nada tan tranquilo, totalmente al margen de lo que está ocurriendo a su espalda. Un tiburón se acerca. Y mucho.
El animal llega a arrimar su cabeza en la parte de atrás de la tabla, pero rápidamente cambia de rumbo y se aleja del hombre sobre la tabla.
Un momento terrorífico que afortunadamente terminó sin ningún percance. El surfista, de hecho, continúa nadando como si nada hubiera ocurrido allí. Al menos se ahorró el susto.