Javier Fernández se proclamó este sábado campeón de Europa en Ostrava (República Checa) por quinta vez consecutiva y entró en la leyenda del patinaje artístico con una actuación brillante con la que igualó el registro del eslovaco Omdrej Nepela, que entre 1969 y 1973 encadenó media decena de títulos seguidos.
Muy pocos patinadores han alcanzado ese registro estratosférico. Javier Fernández lo consiguió con solvencia, sin la perfección de otras jornadas, pero con un final feliz que le llevó a sentarse en un trono que no abandona desde 2013.
Su superioridad en Europa es aplastante, sumó un total de 294'84 puntos en los dos programas y en el mundo pocos pueden hacerle frente.