Se trata, probablemente, del gesto más deportivo de los útlimos tiempos. En el Triatlón de Santander, el británico James Teagle se equivocó de camino antes de llegar a la meta, Diego Méntrida le superó, pero en lugar de cruzar la meta, dejó que su rival pasase primero.
El español tenía la oportunidad de subirse al podio como tercer clasificado, pero tal y como él cuenta, no le parecía lo correcto.
"Por un error suyo, no me parecía justo que entrara yo tercero y él cuarto. A mi entender, él me había ganado donde tenía que ganarme, que es corriendo. Simplemente me paré y le dejé pasar, me pareció lo más justo", afirma Méntrida, que se ha ganado el respeto de todo el mundo el deporte.