Conor McGregor ha irrumpido de vuelta en el circo de la UFC por todo lo alto. Todo estaba tranquilo a falta de un mes de que el irlandés volviera a pelear, pero el excampeón realizó un directo en el que atacó entre otros a Ilia Topuria, aunque no dudó en crear polémica contra muchos peleadores conocidos dentro de la UFC.
Las dos últimas veces que Conor McGregor se metió en un octógono a pelear, fueron en 2021 contra Dustin Poirier, siendo en la última de las dos en la que se rompió la tibia. Tras este combate el irlandés tuvo que quedarse fuera de las peleas, recuperarse y seguir entrenando, aunque nunca ha dudado en potenciar la 'imagen arrogante' que creó a su alrededor.
McGregor, manteniendo sus típicas provocaciones, cargó contra Ilia Topuria. El irlandés le dedicó al hispano-georgiano las siguientes palabras: "Que se joda Topuria. Me importa una mierda. Me recuerda a un Artem Lobov retrasado. Creo que Holloway lo destrozará. Ilia no es un campeón. Puede que tenga un cinturón, pero es un cinturón sin sentido mientras él lo sostenga".
Después de menospreciar de esta manera al vigente campeón de peso pluma de la UFC, Conor se refirió a la doble nacionalidad de Ilia para burlarse de que no sabe ni cuál es su país. Topuria parece haber hecho oídos sordos puesto que no se ha pronunciado en sus redes sociales y lo único que ha hablado de McGregor en los últimos tiempos ha sido para retarle a un combate.
McGregor no solo insultó a Ilia, también menospreció a muchos conocidos luchadores como lo son: Khabib, Volkanovski, al que asegura que "le habría arrancado la cabeza de los hombros", Poirier...
El próximo 29 de junio se materializará el regreso de McGregor. Se enfrentará en el UFC 303 que se disputará en en Las Vegas con el estadounidense Michael Chandler, que tiene un récord de 23-8. El combate será dentro del peso welter, donde el irlandés buscará de nuevo regresar al 'prime' que vivió en 2016.
Su padre, indignado
Obligan a un niño de cinco años a quitarse la camiseta del Espanyol para poder entrar en el campo del Girona
"El bebé se ha tenido que quitar la camiseta del Espanyol porque dicen que con ella no puede entrar. Terriblemente peligroso. Pueden morir todos. Un niño de cinco años", se escucha decir a su padre.