El pasado lunes se vivió un momento peculiar en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. Javier Fernández llegaba desde la República Checa con su quinto campeonato de Europa bajo el brazo, algo digno de reconocimiento por parte de todos, aunque el recibimiento que tuvo el patinador seguro que no fue el esperado.
'SuperJavi' apareció por la puerta de llegadas y no vio a nadie que le recibiese, ni una pancarta, ni un cántico, nadie en el aeropuerto que le felicitase por su hazaña.
Esto contrastó con la llegada que tuvo Jesé Rodríguez a Las Palmas, por ejemplo, al que recibieron cientos de personas. Sin duda, una triste anécdota para un Javier Fernández que merece algo más por sus cinco campeonatos europeos consecutivos.