Una recuperación casi milagrosa en la NFL. El jugador Ricky Pearsall ha vuelto a entrenar con los 49ers menos de dos meses después de recibir un disparo en el pecho.

Este martes el equipo difundió imágenes del entrenamientos y se pudo ver a un sonriente Pearsall trabajando junto a sus compañeros.

El pasado 31 de agosto su imagen era bien distinta: conmocionado y ayudado por los agentes taponando la herida en su pecho justo después de ser alcanzada por una bala.

Pearsall acababa de recibir un disparo. La bala atravesó el pecho del jugador de la NFl y ahora, 44 días después, ha vuelto a entrenar. Una recuperación casi milagrosa.