El deporte más salvaje del mundo se practica en la región rusa de Tambov. El Kila sigue siendo el deporte rey, forjado en el siglo XII, es una mezcla del rugby, las artes marciales mixtas y el boxeo, donde se permite prácticamente todo.
Se trata de un partido de tres contra tres, donde el objetivo es llevar una pelota pesada de cuero a la zona de anotación de unos rivales que harán absolutamente de todo por impedirlo.
Sin duda, es un deporte no apto para cobardes, que persiste como símbolo de la cultura rusa.