Estos parapentistas se las prometían felices en su último salto. Lo cierto es que lo que les esperaba en el agua no era nada amigable.
Estas imágenes han tenido lugar en Bulgaria. Cuando se disponen a aterrizar, se percatan de que en el agua les espera un banco de medusas.
Un susto mayúsculo ante el que gritan y se ríen, intentando evitar el agua en la medida de lo posible.