La indignación es la protagonista en una ciudad víctima de las preferentes. Los vecinos de Mataró desatan su rabia en la sucursal a la que culpan de haberles robado la confianza y los ahorros de toda una vida.

A Inmaculada le puede la ira, el dinero que le dieron por el accidente de su marido se ha quedado en nada. “Son ladrones, criminales y canallas porque si no fueran criminales nos devolverían nuestro  dinero”, cuenta indignada.

Sienten que su entidad de toda la vida les ha traicionado. “Nos sentimos engañados porque los directores nos decían dónde poner nuestro dinero y confiábamos en ellos”, asegura Juan.

Francisco pierde los nervios cuando piensa en los 42.000 euros que tiene bloqueados. “Como voy a querer yo asumir riesgos con mi dinero, me han engañado”, denuncia. El 80% de las víctimas de las preferentes son jubilados o parados, un 12% de la población ha visto cómo sus ahorros se han esfumado.