Antonio no encuentra encofradores que le ayuden en su empresa. "Tenemos más faena que trabajadores. Hay ofertas de otros países. La gente se está marchando", asegura el encofrador, Antonio Egea. Se refiere a Alemania. A pesar de haber oferta de sobra en España, prefieren irse a probar suerte fuera. Y la razón es económica. "En entorno a 3.500 a 5.000 euros al mes encofrando en Alemania. Aquí un encofrador puede estar cobrando 1.800, 2.000" euros, señala Antonio.
El país germano busca trabajadores europeos para este y otros puestos. Desde electricistas o fontaneros, hasta enfermeros, farmacéuticos, o fisioterapeutas. Así lo anuncia el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) en su página web. El país germano necesita mano de obra cualificada, y para algunos puestos no exige ni conocer el idioma.
Francesca Pasarisa, la directora general de Divico, una consultoría especializada en la búsqueda de talento sanitario, explica que los "salarios son muchos más altos que en España y las competencias profesionales también son mucho más interesantes". "Lamentablemente, no podemos competir", expresa Pasarisa.
¿Qué condiciones ofrece Alemania?
Y es que las condiciones son llamativas: ofrecen 2.800 euros al mes netos y contrato indefinido. Pero no solo se queda ahí, sino que te pagan el vuelo de ida, el hospedaje durante un mes, ayudas a la vivienda y hasta el curso de alemán, en caso de que fuera necesario.
Algunos puestos buscan atraer talento también con un plan de pensiones, o una tarjeta de combustible. Con estas condiciones, ¿se iría a Alemania? María Ruiz, una estudiante de Enfermería señala que sí: "Sin pensármelo... Las condiciones son mucho mejores que en España". Jaime Guille, compañero de María, opina lo mismo: "Es muy inestable el trabajo aquí".
Arturo González Rivas, ingeniero aeronáutico en la Agencia Espacial Europea, se encuentra ahí desde hace ya tres años. Se fue, dice, "porque no le quedaba otra opción": al no encontrar trabajo en Madrid por el COVID unido a que las condiciones laborales en Alemania "son mucho mejores", decidió irse. "Conoces a muchos españoles en tu misma situación que se han mudado", explica Arturo. Sin embargo, aspira a volver a España en un futuro. Pero claro, para eso, dice, necesita encontrar una oferta de lo suyo en España.
Una misión casi imposible
Alquilar un piso, una misión casi imposible: "Dijimos que éramos pareja y ni aún así nos llamaron"
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