Este 2023 se estrena con una subida de los peajes en 11 autopistas españolas. En concreto, los precios suben un 4%. Sin embargo, seguirán congelados los de las autopistas que fueron rescatadas y son ahora gestionadas por el Estado a través de la sociedad Seiit.
Dichos peajes deberían haber subido un 8,38% en ocho de ellas y el 9,46% en otras tres en función del IPC pero el Gobierno decidió limitar la subida al 4% con el objetivo de ayudar a la ciudadanía a afrontar el escenario actual de altos precios de la energía, derivado de la persistencia del conflicto en Ucrania tras la invasión rusa, que afecta muy especialmente a la movilidad y a la renta disponible de los hogares.
Por ello, incluyó en el real decreto-ley para responder a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania aprobado en la última semana del 2022 esta subida limitada al 4% en las autopistas AP-51, AP-61, AP-53, AP-66, AP-7 Alicante-Cartagena, AP-7 Málaga-Guadiaro, AP-68 y AP-71, AP-9, AP-6 y AP-46.
De esta manera, el Gobierno subvencionará entre 2023 y 2026 parte de los ingresos que las concesionarias dejarán de percibir el año que viene por la contención del incremento de los peajes. En concreto, ha habilitado una línea de 23,3 millones de euros para financiar la reducción del incremento de las tarifas en 2023, y ha establecido la obligación de que la Administración General del Estado dote las partidas necesarias para mitigar parcialmente la subida entre 2024 y 2026 para que esta sea escalonada.
La subida de tarifas es acumulativa, de ahí la necesidad de repercutir nuevamente al usuario la diferencia que no abona en 2023, ejercicio en el que estaba previsto que subieran en torno al 8,38% por la inflación, aunque poco a poco, para que pueda ser asumida en mejores condiciones por los ciudadanos.
Suben los precios también de los peajes de Cataluña
Los cuatro peajes delas carreteras catalanas que son gestionados por la Generalitat también subirán este nuevo año. La subida será de hasta un 7,3 %, el porcentaje equivalente al aumento interanual del IPC registrado en octubre.
Así, en la C-16, los peajes del Túnel del Cadí se incrementarán en un 6,57 %; los de Vallvidrera, en un 7,3 %; y los del tramo comprendido entre Sant Cugat, Terrassa y Manresa, en un 7,19 %. En la C-32 sur, entre Castelldefels, Sitges y el Vendrell, el aumento será de un 7,3 %.
Con todo, también entrarán en vigor nuevas modificaciones en las bonificaciones para algunos usuarios, que pagarán menos de lo que pagaban hace 15 años, lo que conllevará que el Govern deje de ingresar alrededor de 50 millones de euros. Los descuentos están pensados para quienes usan los peajes por "movilidad obligada", es decir, porque tienen difícil alternativa al uso del coche para desplazarse hasta su lugar de trabajo.
El Govern subraya que en Manresa, en supuestos de "movilidad obligada", se pagará menos de 2 euros por primera vez en más de 20 años, mientras que en el caso de la C-32 en el peaje de Vallcarca los precios serán los más bajos desde 2008 en estos casos.
