El Banco de España calcula que más de 600.000 familias podrían optar a las medidas de alivio hipotecario aprobadas por el Gobierno a finales de 2022, teniendo en cuenta el alza del euríbor, aunque, contando con la experiencia del pasado, rebaja a 200.000 el número de hogares que podrían adherirse.
En el Informe de Estabilidad Financiera publicado este miércoles, el supervisor explica que con una subida del euríbor de 400 puntos básicos, como la que se ha producido hasta ahora desde finales de 2021, aunque aún no se haya trasladado íntegramente, habría 549.000 hogares que podrían optar a las medidas temporales del nuevo Código de Buenas Prácticas.
Si se suman las medidas más estructurales contempladas en el mismo código, esta cifra de potenciales beneficiarios se elevaría y superaría los 600.000 hogares, según reconocen fuentes del supervisor. Sin embargo, con la experiencia del anterior Código de Buenas Prácticas calculan que los hogares que se podrían acabar acogiendo serían unos 200.000.
A finales de 2022, el Gobierno aprobó una batería de medidas de alivio hipotecario ante el alza del euríbor y calculó que más de un millón de familias podrían acceder a ellas, lo que se traducía en uno de cada tres hogares con hipotecas a tipo variable.
Sin cuestionar estas cifras, desde el Banco de España calculan que, por el momento, con una subida del euríbor de 400 puntos básicos, el número de familias que podría optar al Código de Buenas Prácticas serían unas 600.000, ya que 549.000 podrían acogerse a las ayudas temporales, a los que hay que sumar parte de las casi 218.000 que podrían optar a medidas más estructurales.
Más hogares endeudados
Al margen de las soluciones para los hipotecados, el Banco de España también avisa de que cuando se traslade el aumento de 400 puntos básicos del euríbor, las familias altamente endeudadas, que destinan al menos el 40 % de su renta al pago de deudas, crecerán en unas 375.000, con lo que la cifra total rozará los 1,5 millones.
Este efecto, además, tendería a ser más intenso en los hogares endeudados de menor renta, que, por el mayor peso del consumo sobre la misma, también se ven afectados en mayor medida por el aumento de la inflación. Así, en los dos estratos de la población con menores recursos, la cifra aumentaría en casi 160.000.
En el caso de las empresas, el supervisor estima que esta misma subida de los tipos de interés de 400 puntos básicos hará que el porcentaje de deuda de las pymes vulnerables crezca casi 11 puntos porcentuales respecto a diciembre de 2021.
La morosidad de los ICO se dispara
En su informe, el Banco de España también pone el foco en los préstamos concedidos por la banca con aval del ICO y explica que el saldo se redujo un 11,3 % porque se están produciendo amortizaciones significativas, lo que a su vez contribuyó a que la ratio de dudosos superara el 7,1 % a cierre de 2022.
Con esa ratio, el saldo de dudosos se sitúa entre 5.500 y 6.000 millones, que es un 78,8 % más que un año antes. Además, los dudosos que ya se considerar efectivamente morosos se han disparado un 177 %.
Como en ocasiones anteriores, el Informe de Estabilidad Financiera del Banco de España advierte de los riesgos por la incertidumbre económica, la elevada inflación y el alto endeudamiento, para lo que recomienda que se tomen ya medidas de consolidación fiscal.
Sobre las crisis del estadounidense Silicon Valley Bank y del suizo Credit Suisse, señala que aumentará los costes de financiación y ello afectará a los bancos españoles aunque su modelo de negocio sea muy diferente y no tengan apenas exposición al banco suizo. De ahí que el supervisor repita su mensaje de prudencia en provisiones y en cuidar el capital.
El Banco de España recuerda además que se mantienen los riesgos geopolíticos y ve dificultades en algunos sectores para trasladar a los precios de venta el alza de los costes de producción y el aumento de los tipos de interés, lo que está elevando la proporción de empresas vulnerables.
El 7,1 % del total de crédito al sector privado residente está en vigilancia especial, eso es, en riesgo de entrar en mora, y aunque es menos que hace un año es un 24,5 % superior que antes de la pandemia.
Al igual que para las empresas, para los hogares se espera un mayor encarecimiento de los préstamos en los próximos trimestres y en el mercado inmobiliario se siguen viendo signos incipientes de desequilibrios y algunas señales de sobrevaloración.
Aunque las condiciones de financiación podría contribuir a una moderación, el Banco de España señala que los precios de los nuevos alquileres están experimentando aumentos significativos que podrían condicionar la evolución de los precios de la vivienda en trimestres futuros.