La bolsa cae el 1,57 % y vuelve a niveles de hace un mes tras los nuevos aranceles anunciados por Trump a Canadá

Donald Trump vuelve a castigar a Canadá con aranceles de un 50% al aluminio y al acero, el doble de lo previsto hasta ahora. Es su represalia al aumento en un 25% del precio de la electricidad que sirve la provincia de Ontario a Estados Unidos. Un nuevo volantazo de esta estrategia trumpista donde lo que hoy es blanco, mañana puede ser negro. Algunas de sus promesas ya están empezando a fracasar.

El republicano prometió que la economía estadounidense explotaría con su llegada. Anunció todo cosas buenas gracias, en gran medida, a sus aranceles. "Una nueva era de ingresos al alza, riqueza en aumento, millones de nuevos empleos y un 'boom' de la clase media", indicó Trump.

Hoy, podría decirse que ese 'boom' ha sido para reventar su economía. Porque el hombre que iba a relanzar su país es el hombre que lo está hundiendo. En una entrevista en Fox, una periodista le preguntó a Trump si esperaban una recesión económica este año y el republicano se limitó a decir: "Odio predecir cosas así. Hay un periodo de transición".

Así que su mensaje se modera. Ya lo dejó caer en su discurso ante el Congreso de Estados Unidos. "Habrá unas pequeñas turbulencias, pero estaremos bien. No será mucho", aseguró.

Esas "pequeñas turbulencias", hoy se traducen en una caída de hasta 11 % en los principales índices bursátiles, desde que llegó a la Casa Blanca. Sus pomposas reuniones repletas de cámaras se han convertido en encuentros a puerta cerrada. Ayer tenía tres. Uno de ellos, además, con sus asesores en materia tecnológica, y sin un solo medio.

Pero mientras, de cara al público, sigue insistiendo en su misiva. "Vamos a recaudar cientos de miles de millones de dólares en aranceles", dice Trump.

Pero hasta su principal exasesor económico le recomienda cambiar de táctica. Porque sus medidas, dice, "están desestabilizando mucho el mercado".