Cobramos más que el año pasado, ya que el salario medio ha crecido más de un 8%, y tenemos más estabilidad laboral. Sin embargo, nuestro dinero vale menos. Pese a que los problemas económicos de los hogares se han reducido en la última década, este último año son más los que pasan muchas dificultades. En concreto, un 9,3% de la población no puede llegar a fin de mes.
De esta forma, comer carne o pescado regularmente se está convirtiendo en un lujo para muchos: más de un 6% no puede permitirse comer estos alimentos al menos cada dos días. "Hemos tenido que comer menos pescado y menos carne roja porque está todo muy caro", señala un hombre al respecto.
A esto se suma el que los que ayudaban donando habitualmente, ya no pueden apretarse más el cinturón. En este sentido, Pedro Castaños, subdirector de la Federación Española de Bancos de Alimentos, destaca que "se han reducido un 19% las donaciones de producto físico y un 30% las donaciones económicas".
En la misma línea, Mila Benito, directora de Comunicación del Banco de Alimentos de Madrid subraya que "hemos entrado en unos niveles de carestía en los precios" que les afecta también a ellos en las compras. "No llegamos solo con las donaciones a garantizar esta cesta básica", lamenta la mujer.
En este contexto, hay un pequeño destello, y es que el último dato del IPC, que ha caído al 2,8%, es esperanza para los bolsillos más ajustados.