Nelson tiene 61 años y es albañil en la construcción. Como él, más del 7% de los trabajadores de este sector superan los 60 años, con una media de edad que se sitúa en los 45, mientras que los menores de 35 años apenas suponen un 9%. Es el caso de Juan. "Gente joven, de mi quinta para abajo, no hay que venga a la obra", señala.

Una circunstancia que supone un nuevo reto para el sector, que se encuentra sin relevo generacional. "Está afectando ahora, ya no hay remplazo", apunta Juan. Una tendencia que no solo afecta a la construcción, sino también al resto del mercado laboral: el empleo juvenil se ha desplomado en los últimos 17 años hasta la mitad y tan solo un 28,6% de los trabajadores en España son menores de 35 años, según datos del Banco de España correspondientes a 2022. En 2005, alcanzaban el 46,3%.

Miguel Ángel Bernal Alonso, economista y socio director de Bernal y Sanz Bujanda explica que el hecho de "que cada vez tengamos personas mayores frente a los jóvenes" significa que no haya "una tasa de restitución" y apunta además que "hay gente muy formada que se va fuera de España". "Una persona de 60 años en la construcción no puede tener la productividad de una persona de 30 años", incide.

Mientras tanto, el peso de los mayores de 45 años en el mercado laboral no hace más que crecer, hasta suponer el 45% de los empleados, frente al 26,4% que representaban en el año 2005. Un envejecimiento que se nota también en los flujos laborales, donde los jóvenes tienen menos problema en cambiar de empleo.

Además, los perfiles más maduros se enfrentarían a una adaptación al mundo digital que en ocasiones cuesta. "O te mueves en el mundo digital o estamos un poquito en brecha", indica Eguzkiñe García, preparadora de Formación Adulta en Master D. Algo, señala no obstante, que "se está reformando, sobre todo con el auge que está habiendo con la FP". "Para ellos al final es un mundo", agrega. Retos que, de no producirse ese relevo, podrían afectar a la productividad en un mundo laboral cada vez más competitivo.