El euríbor sigue en caída libre y las personas que tengan una hipoteca de tipo variable siguen de enhorabuena. El índice de referencia para las hipotecas variables vuelve a caer en octubre, su octavo mes consecutivo, y cierra el mes en un valor medio del 2,691%, lo que supone la cifra más baja desde noviembre de 2022.

Con respecto al mes pasado, que cerró con una media del 2,9%, el euríbo cae 0,245 puntos porcentuales. Este valor es hasta 1,469 puntos menor que el anotado hace justo un año, en octubre de 2023: 4,160%.

De esta forma, las personas que tengan contratada una hipoteca de tipo variable y que tengan que hacer una revisión anual con el dato de este mes verán cómo su cuota se reduce entre 120 y 240 euros de media, la mayor rebaja desde diciembre de 2009, según el análisis del comparador hipotecario iAhorro. Por su parte, quien tenga que hacer la revisión semestral notará una rebaja menor, de entre 80 y 160 euros, calculan.

Un año desde el pico más alto del euríbor

La situación actual contrasta notablemente con la que se producía hace justo un año, cuando el euríbor registró su pico más reciente, con el dato más alto desde noviembre de 2009, señalan también desde el comparador. "Ha llegado ya la mejor temporada del año para pedir una hipoteca", afirma Simone Colombelli, director de Hipotecas de iAhorro, que agrega que "el euríbor podría terminar el año en torno al 2,3 o 2,2%". Otros expertos sitúan el cierre del año en torno al 2,5 % o 3 % a cierre de 2024.

El euríbor comenzó el año con una tasa del 3,609 %, en tanto que en febrero subió al 3,671 %; y en marzo, al 3,718 %. En abril inició una senda descendente que se mantiene. Ese mes cerró en el 3,703 %; en mayo, en el 3,680 %; en junio, en el 3,650 %; en julio, en el 3,526 %; en agosto, en el 3,166 %; y en septiembre, en el 2,936 %.

El indicador cae con fuerza después de que el Banco Central Europeo (BCE) recortara el pasado 17 de octubre los tipos de interés en 25 puntos básicos. Esta fue la segunda vez que el organismo optó por rebajar el precio del dinero de forma consecutiva, y la tercera vez en el año. En este contexto, los analistas esperan que el indicador siga su tendencia a la baja, aunque advierten de que dependerá del ritmo de los recortes de tipos de interés que acometa el BCE, las perspectivas de crecimiento de la zona euro y también de la evolución de la inflación.

Justo esta misma semana, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, se mostró satisfecha con el descenso de los precios que ha experimentado la eurozona, pero instó a la cautela a la hora de recortar los tipos de interés. El BCE, según dijo, no tiene "una secuencia sistemática lineal, que sería el camino a seguir".

"Dependemos de los datos, miramos todo lo que está disponible y analizamos esos datos sobre la base de tres criterios clave, que incluyen las perspectivas de inflación, la inflación subyacente y la transmisión de la política monetaria", señaló. El organismo, aseguró, debe ser prudente.