La segunda jornada de huelga indefinida de los vigilantes de la empresa que trabaja en los filtros de seguridad del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas transcurre con bastante normalidad, salvo mayores tiempos de espera en el acceso en los momentos en que hay salida de más vuelos.
Segundo día de salida de vacaciones de Semana Santa, están previstas 1.054 operaciones aéreas en el aeropuerto madrileño y se espera que pasen por sus instalaciones 192.000 pasajeros. Se trata de un importante aumento de afluencia de pasajeros en comparación con un sábado normal, cuando Barajas suele contabilizar 120.000 pasajeros y 950 vuelos entre llegadas y salidas.
La movilización ha sido convocada por el Sindicato Autónomo de Trabajadores de Empresas de Seguridad de Madrid (ATES) por motivos "económicos, contractuales y sociales", ha señalado Cristina Galán, miembro del comité de huelga.
Según Galán, aunque desde la Delegación del Gobierno se han impuesto servicios mínimos del 90%, al tratarse de un servicio esencial, y solamente el 10% de los trabajadores puede ejercer su derecho a huelga, "los efectivos se ven mermados".
