Los precios no paran de subir y la cesta de la compra se va quedando vacía. Lo dicen los propios consumidores en un supermercado ante las cámaras de laSexta: "Ahora con el mismo presupuesto compras menos porque todo está más caro"; "Está todo muy caro. Hay que buscar las cosas más baratitas".
Con la inflación al 3,5% en septiembre, los compradores han empezado a modificar su modo de hacer la compra. Cada vez vamos más al supermercado, pero nos llevamos menos comida a casa. Visitamos más tiendas para comparar precios, buscamos ofertas y tiramos, cada vez más, de las marcas blancas.
Bernardo Rodilla, retail business director de Kantar Worldpanel, explica en laSexta que "es una alternativa para el consumidor para hacer frente a la inflación" y asegura que "la marca blanca supone ya un 43,5% de lo que estamos comprando en el gran consumo envasado".
Son unos cambios en el consumo que hacen prever unas Navidades convulsas en los supermercados. Con guerras de ofertas para captar a unos compradores cada vez más pendientes de los precios.