Miles de personas se han manifestado por las calles de Bilbao para reclamar un sistema público de pensiones "dignas" y subrayar que "un año después" del inicio de las protestas siguen "en lucha". Asimismo, han advertido a lospartidos políticos que no hagan "proclamas vacías sino que ejecuten medidas que se acerquen" a sus demandas básicas.
Con motivo del primer aniversario de las movilizaciones que se han desarrollado en todo el Estado, el movimiento de pensionistas de Bizkaia se ha manifestado por las calles de Bilbao con una marcha que ha arrancado desde las inmediaciones de la sede de Confebask entre gritos de "gobierne quien gobierne, las pensiones se defienden".
Tras una pancarta en la que se podía leer 'Pensiones públicas dignas - No 0,25%' y 'Un año de lucha-Pentsionistak aurrera', y con muchos manifestantes ataviados con pañuelos rojos, la movilización ha transcurrido entre gritos de "esta batalla la vamos a ganar" y "si esto no se arregla leña, leña, leña".
En declaraciones a los medios de comunicación, los portavoces del movimiento Andrea Uña y Jon Fano han destacado la "disposición de los pensionistas" para seguir defendiendo su tabla reivindicativa que incluye pensiones mínimas de 1.080 euros, una de sus "reivindicaciones estrella y con la que no se va a claudicar".
Asimismo, han resaltado que el conjunto de las plataformas vascas y navarra han acordado mantener las movilizaciones durante los próximos meses, "con formas distintas y con más peso de las concentraciones de los lunes y las movilizaciones comarcales".
"Tenemos previsto también llevar a cabo un plan de movilización hasta mayo donde esperamos realizar una movilización ciudadana de gran importancia que recoja no solo al mundo de los pensionistas, sino a trabajadores, mujeres en general y jóvenes", han añadido.
Además, han sostenido que ante la llegada del periodo electoral, exigirán a los partidos que no hagan "proclamas vacías sino que ejecuten medidas que se acerquen a las demandas básicas".
Pese a reconocer que el balance de lo conseguido producto de la movilización "no ha sido el pretendido", han advertido de que "tampoco ha sido despreciable". "Hemos logrado que las demandas del movimiento de pensionistas hayan entrado la agenda política de partidos instituciones y nadie podrá eludir tener que posicionarse ni tomar medidas de mejora de las pensiones en especial los gobiernos de Madrid, Gasteiz e Iruña", han añadido.
De este modo, han resaltado que en el plano material han conseguido que las pensiones en general suban un 1,7% este año y un 1,6% en 2019, que las pensiones mínimas lo hagan un 3% en ambos ejercicios y que la base reguladora de las pensiones de viudedad pasen al 56% en 2018 y al 60% en 2019, así como que la aplicación del factor de sostenibilidad sea prorrogado hasta 2023.
"Estos limitados avances están muy lejos de nuestras reivindicaciones fundamentales. Entre otras, garantía de la subida permanente de las pensiones según el IPC, pensión mínima de 1.080 euros que afectaría principalmente a las mujeres, reduciendo la brecha de pensiones existentes, o derogación definitiva de factor de sostenibilidad", han enumerado.
Además, se han mostrado conscientes de la importancia de los próximos meses, "más aún cuando en mayo se van a celebrar elecciones municipales, forales en algunos casos y europeas y todos los partidos van a tratar de no aparecer al menos contrarios a nuestras demandas".