En los últimos diez años, el volumen de dinero generado por actividades ilegales en España, como el tráfico de drogas, la prostitución y las apuestas ilegales, ha alcanzado los casi 14.000 millones de euros, lo que representan cerca del 1% del producto interior bruto (PIB). Estas cifras, sorprendentes para muchos, son el resultado de un esfuerzo internacional por contabilizar el valor que estas operaciones no reguladas tienen en la economía. Así lo explicó Santiago Lago, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Santiago de Compostela: "No es algo que hagamos los españoles a motu proprio. Es un acuerdo internacional sobre intentar medir [...] el valor que acumulan estas operaciones".

El tráfico de drogas encabeza la lista, representando un 0,5% del PIB, seguido de la prostitución (0,35%) y, más a distancia, el juego ilegal con un 0,07%. En total, estas actividades ilegales alcanzan una cifra similar a la que España destinó a defensa en 2024.

Este tipo de mediciones, que también se realizan en otros países como Francia, Italia y el Reino Unido, revelan que España sigue la tendencia internacional en la contabilización de la economía sumergida. Italia, por ejemplo, presenta un porcentaje mayor, mientras que Portugal y Alemania quedan rezagados. Como dato curioso, dentro de estas estimaciones también se incluyen las propinas en bares, equiparadas a otras actividades ilegales.