La CEOE ha elaborado un documento en el que explica su propuesta de medidas para afrontar la recuperación de la crisis económica derivada delcoronavirus. Entre esas medidas destacan que "la salida de la crisis requiere garantizar la liquidez para las empresas", especialmente "en los sectores con mayor falta de ingresos".

La patronal también pide ampliar el alcance de las medidas tributarias y de cotizaciones sociales adoptadas por el Gobierno. En este sentido exigen la supresión de las cuotas empresariales a la Seguridad Social en los ERTE y "reducir las cuotas sociales para aquellas empresas que se comprometan a mantener el empleo en condiciones y plazos claramente delimitados".

Además, plantean la posibilidad de alargar los ERTE en algunos sectores (tanto de suspensión de contratos como de reducción de jornada) así como incorporar nuevas "medidas excepcionales" que permitan "adecuar la plantilla de las compañías a la paulatina recuperación de la actividad". Buscan así "limitar el alcance del compromiso del mantenimiento del empleo y los efectos de su posible incumplimiento".

La CEOE también hace referencia a las pymes y autónomos, "las más vulnerables a episodios como el actual": para preservar ese tejido creen necesario "hibernar" las salidas de caja con medidas específicas en el área fiscal, como "diferir el pago de impuestos y autoliquidaciones", así como en el área social y laboral, en la que proponen "retrasos en el ingreso de cotizaciones".

También exigen medidas orientadas a acelerar las entradas de caja como "agilizar los pagos de las administraciones públicas" y aumentar la resiliencia ante eventos similares en el futuro.

Además, proponen el desarrollo de programas específicos para la protección y el refuerzo "después de la crisis" para mayores, afectados por el coronavirus y el personal sanitario y así "no dejar ningún colectivo atrás". Sobre la renta mínima vital, señalan que "debería ser eficiente, transitoria y enfocada a la rempleabilidad de sus beneficiarios".

La patronal pide que se defina un plan de restricciones ante la posibilidad de que se produzca un rebrote de la pandemia. Así, piden reducir la movilidad en un plan por etapas a las que correspondan "diferentes intensidades y formatos de aislamiento" atendiendo a las comunidades autónomas, ayuntamientos y organizaciones empresariales.

Por último, para evitar nuevos confinamientos que "tendrían un grave impacto en la actividad económica" proponen un plan sanitario con test masivos para "incrementar la capacidad de diagnóstico y la trazabilidad de los contagiados". Piden, además, que las empresas privadas "puedan hacer test a su personal según sus necesidades".

Un autobús de la línea 135, en el intercambiador de Plaza de Castilla, a 5 de agosto de 2024, en Madrid (España).

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