El riesgo de impagos se ha disparado en España. Medio millón de negocios se encuentra en riesgo de quiebra debido al retraso en los pagos. Las empresas pagan, de media, en un plazo de 72 días, mientras que la administración pública lo hace en 61 días.
Sin embargo, la ley marca que hay que pagar en un plazo de 60 días. Los datos reflejan un incremento de la morosidad del 2% en un contexto marcado por la inflación, el pago de los créditos de la pandemia, el retraso en la llegada de materiales tras el colapso mundial o el aumento de costes en energía.
Un 12% de las empresas con impagos corre el riesgo de cerrar. Tamara Soengas, chief marketing manager en 'Custotech' es una de las miles de empresarias que depende del pago de sus clientes, tal y como ha relatado a laSexta. Una situación que, según explica, "genera inseguridad, tensión, malestar y preocupación". Soengas recurrió a una empresa externa para reclamar el cobro de esos impagos con inmediatez.
"Muchos creen que estos servicios pueden ser largos y costosos", asegura Jaume F Borja, Ceo de 'Cobramus'. Sin embargo, iniciar un procedimiento judicial es en muchas ocasiones la única vía que tienen las pequeñas y medianas empresas, autónomos y empresarios. Puedes consultar toda la información en el vídeo situado sobre estas líneas.