Por ahora no se ha alcanzado ningún acuerdo, por lo que se mantienen las cancelaciones para los vuelos previstos para los días 25 y 26 de julio. A partir de esta madrugada, empezarán a funcionar los servicios mínimos pactados. Serán del 100% para los vuelos hacia Baleares y Canarias, de un 59% para destinos internacionales y de entre un 35% y un 59% para los vuelos peninsulares, dependiendo de la distancia entre el punto de origen y destino.
La aerolínea irlandesa ha asegurado que va a afectar a más de 50.000 pasajeros, pero que todos ellos están reubicados o se les ha devuelto dinero.
Sin embargo, advierte que no va a pagar ninguna de las indemnizaciones a las que tienen derecho por ley los usuarios.