Las fuertes lluvias en el norte peninsular han provocado crecidas en los ríos de Navarra y La Rioja, como el río Arga y Ulzama. No obstante, la situación no será comparable a la de diciembre, cuando se experimentaron inundaciones históricas.
A lo largo del día de hoy seguirá lloviendo con fuerza, pero las precipitaciones empezarán a remitir hacia las 18:00 horas hasta no dejar ni rastro de la lluvia este martes por la mañana.
En la Cuenca Cantábrica se encuentran en alerta el río Bidasoa, en prealerta el Urumea y en aviso el Oria, el Nervió y el Asón. El primero de todos estaba por debajo de los dos metros este domingo y hoy ha registrado 6,6 metros, alcanzando un caudal máximo de 630 metros cúbicos por segundo. En la Cuenca del Ebro, principalmente en el entorno de Pamplona, se encuentran en alerta Ulzama, Burlada y Asiáin.
Estas graves crecidas han sido provocadas por las fuertes precipitaciones en forma de lluvia y un deshielo acelerado. Por ejemplo, en los Pirineos en 72 horas se habrán recogido más de 200 litros por metro cuadrado.
El temporal marítimo del Cantábrico también ha comenzado a perder fuerza, al igual que el viento en el este de la Península.
Respecto a las temperaturas, los valores mínimos subirán para volver a bajar. De manera excepcional, este martes viviremos una jornada cálida para regresar a las heladas moderadas a mediados de semana.