De borrasca en borrasca

Jana, Konrad y ahora Laurence: más lluvias, más nieve y algo más de calor para empezar la primavera

¿Por qué es importante? Con la ligera subida de temperaturas y la nieve que ha caído este último fin de semana, los ojos están en los cauces de los ríos ya crecidos de los ríos por las lluvias de los últimos días y el derretimiento de la nieve que bajará de la montaña.

Vista de una pasarela que prohíbe el paso sobre el río Manzanares en Madrid este lunes tras las fuertes lluvias que ha dejado la borrasca Laurence.
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Jana, Konrad y ahora Laurence. Se trata del nuevo episodio de lluvias extendido por buena parte de España que se alargará hasta tres semanas. Precipitaciones que continúan a pesar del inicio de la primavera que tendrá lugar este jueves 20 de marzo. Prueba de ello, será el aumento de temperaturas que se observará en prácticamente todo el país, pero será lo único porque los paraguas seguirán siendo necesarios.

Laurence, la duodécima borrasca de alto impacto de esta temporada 2024-2025, llega cuando todavía partes del país se recuperan de los estragos provocados por las lluvias anteriores dejadas por Jana y Konrad. Sin ir más lejos, la playa de la Malagueta ha amanecido este lunes cubierta de cañas y montículos arrastrados por las fuertes lluvias hasta el arenal. Allí se espera que en doce horas caigan hasta 80 litros por metro cuadrado.

Cerca de allí, en la provincia de Sevilla el municipio de Villaverde del Río ha visto como algunas de sus zonas se anegaban obligando a la Policía Local a solicitar precaución a la ciudadanía. De hecho, han procedido a retirar numerosos vehículos, además de cortar algunas calles del pueblo en previsión. Las autoridades locales también mantienen cerrado el cementerio.

De hecho, en esa zona hay hasta cuatro municipios en riesgo rojo por posibles desbordamientos de dos ríos, el Guadiamar y el Riviera Huesna, ambos afluentes del Guadalquivir. Precisamente, uno de ellos es Villaverde del Río, al que se suman El Guijo, Villanueva del Río y Gerena. Allí, el agua del arroyo de la Encarnación bajaba con tal fuerza que simulaba un torrente.

Además, su Policía Local ha tenido que cortar la carretera SE-3410 ya que el agua no permite circular sobre ella al estar anegada. También ha sido prohibido el tránsito por la vía que conecta Gerena con Guillena, donde la madrugada también ha sido de intensas lluvias, siendo esta zona en la que se han registrado la mayoría de incidencias en toda la provincia de Sevilla.

También las calles de San Lúcar de Barrameda se ven colapsadas por el agua, mientras que su fuerza también la ha llevado a aislar una urbanización en el término municipal onubense de Gibraleón cuyos residentes han tenido que ser ubicados. La situación allí podría empeorar en vista a la pleamar que podría hacer crecer todavía más el cauce del río Odiel.

Y es que sobre todo serán las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz las más afectadas por la llegada de esta nueva borrasca que entrará por el oeste desde donde se irá extendiendo, aunque lo peor en Andalucía ya se verá durante la jornada de este lunes y la madrugada del martes. Es por ello, que el 112 andaluz ya ha pedido a la población que evite cualquier desplazamiento que no sea estrictamente necesario.

A partir de entonces, será el jueves cuando vuelven a intensificarse las precipitaciones. Eso sí, también lo harán en Castilla y León, Comunidad de Madrid, y Extremadura donde las lluvias de los últimos días ya han provocado desbordamientos como el del Charco de la Maricana en Jarandilla de la Vera, en Cáceres. Allí, en esa localidad un coche ha quedado prácticamente vertical al borde del arroyo tras ser arrastrado por el agua. Tanto en Extremadura como en Andalucía las lluvias continúan provocando cortes de numerosas carreteras.

Como también lo ha hecho la nieva durante todo el último fin de semana del invierno, en el que los copos han llegado a caer en cotas por debajo de los 800 metros y en capitales de provincia. Una de ellos fue Ávila donde la nieve dejó imágenes aéreas de cuento, además de problemáticas en gran parte de sus carreteras. También nevó en Burgos donde no llegó a cuajar, frente a Segovia donde sí lo hizo. La nieve también se repitió durante los últimos días en Navacerrada donde no paró de caer, dejando hasta un metro de espesor.

Ahora, con la ligera subida de temperaturas provocada por la nueva borrasca que llega del suroeste peninsular todos los ojos están en los cauces de los ríos que con las lluvias y el derretimiento del hielo amenazan con crecer, todavía más. Eso sí, gracias al trabajo de las máquinas, al menos, en Navacerrada la carretera es transitable, mientras que zonas de la capital están cortadas como es el paso del Manzanares por El Pardo.