Las acciones de Tesla al borde del colapso, mientras Musk busca refugio en el gobierno

Mientras Elon Musk refuerza su presencia política desde el Edificio de Oficinas Ejecutivas Eisenhower y lidera el nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental, su imperio Tesla atraviesa una de sus peores crisis. La conexión de Musk con el gobierno, especialmente tras su intento de posicionarse como un político influyente, no ha calado ni en inversores ni en ciudadanos, quienes no han respaldado su nueva faceta pública.

No ha bastado con montar un concesionario Tesla en plena Casa Blanca, acompañado por un Trump que elogió públicamente los vehículos de la marca. Tampoco con las declaraciones de apoyo del presidente, quien afirmó: "Elon Musk está ‘arriesgándose’ para ayudar a nuestra nación, ¡y está haciendo un trabajo fantástico!". Y, en un gesto de respaldo, añadió: "Voy a comprar un Tesla nuevo mañana por la mañana como muestra de confianza y apoyo a Elon Musk, un estadounidense verdaderamente admirable".

Sin embargo, los números no le han sido favorables. Las acciones de Tesla han caído más de un 40% desde enero, y un 53% en diciembre, borrando casi todo el "efecto Trump" que había impulsado su cotización tras las elecciones. Esta caída está teniendo un impacto directo en la fortuna personal de Musk: solo el lunes perdió 29.000 millones de dólares, según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg.

Los analistas de Wall Street, incluidos los de RBC, UBS, Goldman Sachs, Mizuho y JPMorgan, han rebajado sus previsiones para Tesla. "Nos cuesta pensar en algo similar en la historia de la industria automotriz, en la que una marca haya perdido tanto valor tan rápidamente", escribieron los analistas en una nota a clientes la semana pasada.

En China, Tesla también enfrenta grandes desafíos, especialmente con la competencia local. Los envíos de la compañía en ese país cayeron un 49% interanual el mes pasado, y las ventas en Europa, particularmente en Alemania, también han disminuido. La relación de Musk con un partido nacionalista de ultraderecha, vinculado a los nazis, ha enfurecido a muchos consumidores europeos. En Alemania, las ventas de Tesla cayeron un 76% en comparación con el año pasado.

Este anuncio coincidió con la revelación de que importantes ejecutivos de la compañía habían vendido acciones por un total de 118 millones de dólares desde principios de febrero.

Ante esta situación, los mercados reaccionaron negativamente. Las acciones de Tesla cayeron un 5% en EE.UU. el lunes y otro 5% el martes.

Pero la caída no solo afecta a los mercados, sino también a los propios clientes. A lo largo de los Estados Unidos, han comenzado a aparecer Teslas incinerados. En un taller en Las Vegas, Nevada, varios vehículos fueron quemados, y uno de ellos fue vandalizado con el grafiti que decía "Resistir" en una de las puertas del edificio. En Seattle, Washington, dos Teslas aparecieron completamente calcinados.

Los inversores tampoco se muestran optimistas. "Es hora de que alguien se haga cargo de Tesla. El negocio ha sido descuidado durante demasiado tiempo", afirma Ross Gerber, uno de los principales inversores de la marca.

#TeslaTakedown

La indignación contra Tesla ha alcanzado tal magnitud que ha dado lugar al movimiento "Tesla Takedown", impulsado por activistas y amplificado en redes sociales. Este movimiento hace un llamado a vender los vehículos de Tesla, deshacerse de las acciones y llevar la protesta directamente a los concesionarios. Incluso han creado una página web con un mensaje claro en su portada: "Vende tus Teslas. Deshazte de tus acciones. Detén a Musk ahora".

El sitio también incluye un mapa interactivo que permite localizar las concentraciones de manifestantes frente a concesionarios de Tesla a nivel mundial, y donde los participantes pueden colgar convocatorias o compartir materiales para difundir en las protestas. "Golpeemos donde más le duele: en su cartera", es el desafiante lema que acompaña la campaña.

La opinión de los estadounidenses

Una encuesta de CNN de la semana pasada reveló que el 53% de los estadounidenses tiene una opinión negativa de Musk, mientras que aproximadamente el 60% dice que no tiene ni la experiencia ni el juicio adecuados para hacer el tipo de recortes radicales que su "Departamento" está llevando a cabo.