El aeropuerto internacional de Bali Ngurah Rai reabrió sus instalaciones tras permanecer tres jornadas cerrado ante la amenaza del incremento de la actividad del volcán Agung, que expulsa desde hace días nubes de ceniza.
El director de información de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNBP, en indonesio), Sutopo Purwo Nugroho, confirmó que el recinto aeroportuario retomó su actividad a las 15.00 hora local.
"Todos los vuelos de salida y llegada están ahora operativos", comunicó Angkasa Pura, la compañía encargada de la operaciones del aeropuerto balinés, en un mensaje de Twitter.
Las autoridades además rebajaron la alerta de aviación a naranja tras reunirse en el aeródromo y evaluar las condiciones actuales, apunta en un comunicado el Ministerio de Turismo.
La aerolínea de bandera singapuresa Singapore Airlines anunció en su portal que al menos dos vuelos saldrán de la isla indonesia con destino a la ciudad-estado y negocia la aprobación de nuevos vuelos de salida.
El lunes, la operadora del aeropuerto de Bali declaró el cierre de las instalaciones "debido a las cenizas volcánicas" que podrían afectar a los motores de las aeronaves y aumentar el riesgo de un accidente aéreo.
Más de 100.000 pasajeros se han visto afectado por la cancelación de casi 900 vuelos procedentes y con destino a Bali.
El Centro de Vulcanología y Mitigación de Peligros Geológicos, por su parte, mantiene el nivel de alerta de erupción al máximo, la zona de seguridad a un radio de hasta 10 kilómetros alrededor del cráter y advierte del riesgo de una erupción mayor.
Las autoridades han ordenado evacuar a cerca de 100.000 personas que habitan en la zona de peligro y casi 40.000 se han registrado ya en los refugios en varios puntos de la isla, aunque algunos residentes se niegan a dejar sus hogares.
El volcán se levanta en el este de Bali, en el distrito Karangasem, lejos de la mayoría de las atracciones turísticas que permanecen seguras, aunque el BNBP recomienda el uso de mascarillas.
Se trata de la primera erupción magmática del Agung desde 1963, cuando las erupciones duraron casi un año y causaron más de 1.100 muertos. Bali es el principal destino turístico de Indonesia con una afluencia anual que ronda los 5,4 millones de visitantes extranjeros, según datos oficiales.
El archipiélago indonesio se asienta en el denominado "Anillo de Fuego" del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida por miles de temblores al año, la mayoría de escasa magnitud.