Su particular y combativa forma de luchar por su pueblo, Palestina, encarándose a soldados israelíes armados con insultos y con manotazos de poca importancia la han llevado ante un tribunal, esposada como si de un criminal se tratara.
Es Ahed Tamimi, una joven de solo 16 años a la que acusan de agresión y 11 delitos más. Para su pueblo todo un icono de la lucha contra la ocupación israelí, un símbolo de la resistencia palestina.
Ahed y su prima fueron arrestadas después de que el vídeo del ya famoso puñetazo se hiciera viral. Ella ha explicado que estaban furiosas porque el disparo de un militar dejó en coma a otro primo de 14 años.
Pero la incansable lucha de Ahed empezó desde muy pequeña. En 2012, con solo 11 años. Con el mismo puño en alto y con las misma fuerza.
Ahed Tamimi creció en un ambiente de resistencia. Sus padres son conocidos líderes antiocupación de un pueblo a unos 20 kilómetros al noroeste de Ramala.
Tras la decisión de Donald Trump sobre Jerusalén, los palestinos ven en Ahed una nueva heroína. Y en las redes, para muchos: "Ella vale mil hombres".
