Al menos 20 personas han muerto en la región siria de Idlib, en el noroeste de Siria, durante varios bombardeos ejecutados por fuerzas del ejército sirio y aliados rusos, según ha constatado la red de activistas del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
Los bombardeos alcanzaron al menos cinco localidades de la región, uno de los últimos grandes bastiones de la insurgencia contra el presidente sirio, Bashar al Assad.
Nueve de estas personas fallecieron en el bombardeo ruso sobre un mercado de la localidad de Balyun; cuatro murieron en un ataque aéreo contra Al Bara; y cinco por la explosión de 'barriles bomba' sobre Abdita, las mismas armas que mataron a otras dos personas, una en Jebghas y otra en Tel Minis.
El Observatorio, que cuenta con fuentes en el interior del país, ha asegurado que hay niños entre los fallecidos, mientras que los medios oficiales sirios no han constatado operaciones militares en estas zonas.