Putin se ha montado su propia película sobre cómo murió el líder de Wagner. Asegura que nadie derribó el avión y deja caer que el problema estuvo dentro. En sus últimas declaraciones también ha negado la existencia de ningún grupo militar privado.
"No hay grupos militares privados en Rusia porque no hay una ley sobre grupos militares privados. No tenemos estos grupos y no lo hemos tenido", ha argumentado en relación al grupo que lideró la lucha en Ucrania, una formación privada que también combatió junto a las tropas rusas en Siria y está presente en varios países africanos en los que Rusia tiene intereses.
En cuanto al accidente de Prigozhin, ha dejado caer que el problema estuvo dentro de la nave. "Se han encontrado fragmentos de granadas de mano en los cuerpos de quienes murieron en el avión estrellado", ha añadido.
En este sentido, descarta que se analizase la existencia de alcohol y drogas en la sangre de los que murieron y recuerda lo que encontraron los servicios de inteligencia rusos en la sede del grupo Wagner registrada el verano pasado.
"Descubrieron, no sólo 100 millones de euros en efectivo, sino también cinco kilos de cocaína", enumera. En cualquier caso, Putin desvincula el accidente con el intento de rebelión de junio por parte de grupo Wagner.