Las autoridades egipcias han arrestado a 22 personas en tres días como parte de una operación contra la población LGBTI del país, según han denunciado activistas y grupos en defensa de los Derechos Humanos.
Al menos 33 personas han sido arrestadas en Egipto desde que el 23 de septiembre un grupo de defensores de los derechos de la comunidad LGBTI enseñara la bandera arcoiris durante un concierto de Mashrou' Leila, una banda libanesa de rock alternativo cuyo cantante se ha declarado gay abiertamente.
La Fiscalía del país anunció una investigación contra los involucrados en el episodio de la bandera, después de que la prensa criticase duramente el acontecimiento, que se saldó con la detención de dos hombres, aunque uno de ellos ha sido liberado.
De entre el resto de detenidos, 16 personas fueron juzgadas el domingo por "promover el desvío sexual" y por "libertinaje" y la sentencia se conocerá el 29 de octubre. La Justicia condenó recientemente a un hombre a seis años de prisión por cargos similares.
La homosexualidad no está explícitamente prohibida en Egipto, pero la discriminación al colectivo LGBTI es constante, con arrestos frecuentes bajo acusaciones de inmoralidad o blasfemia. Las ONG Amnistía Internacional (AI) y Human Rights Watch (HRW) han presentado estos días informes sobre la cuestión donde también se revelan casos de tortura por parte de las fuerzas de seguridad egipcias.
AI acusó a las autoridades de Egipto de tener la intención de someter a exámenes anales forzosos a seis homosexuales detenidos por cargos de "depravación" y de "promover desviaciones sexuales en las redes sociales".